Fuente: Canarias7  27/10/2008

Mientras las presas del Cabildo conservan cerca del 50% del agua envasada, las particulares, como las tres de La Aldea ya están tocando fondo, dado que Parralillo está a menos del 20% de su capacidad, Siberio al 13% y Caideros de la Niña conserva un 15% del agua envasada en 2007.

Las lluvias caídas a lo largo de este mes, sobre todo en los últimos días, han devuelto un poco de alegría a los agricultores de medianías y cumbre de la Isla, pero todo de circunscribe por ahora al haberse ahorrado un par de dulas. Esta alegría se ve frenada por el hecho de que, prácticamente todas las presas de Gran Canaria, sobre todo las de titularidad privada o de comunidades de regantes, están en torno al 15% de su capacidad.

Así, mientras las del Cabildo, como la de Chira o Ayagaures, conservan el 45% y 76% de su capacidad, las de la cuenca aldeana presentan unos datos preocupantes, dado que mientras a Parralillo le quedan 900.000 metros cúbicos (el 20%), a Siberio le quedan 500.000 metros cúbicos (13%) y a Caideros de la Niña, 300.000 metros cúbicos, el 15% de su capacidad, que es de cerca de 2.5 millones de metros cúbicos.

Los signos, barruntos y cabañuelas hablan de que el que está a punto de llegar será un invierno pródigo en precipitaciones, pero lo cierto y verdad es que el agua caída hasta la fecha lo ha hecho lejos de las cuencas que albergan a las principales presas, centrándose la media caída, unos 35 litros por metro cuadrado en los tres últimos días, especialmente en zonas de Valleseco, Gáldar, Guía y San Mateo.

Reza La Aldea

Con sus tres grandes presas casi a cero y con el proyecto de la cuarta, la del Salto del Perro, camino de Madrid en el paquete de obras hidráulicas para realizar a medio y largo plazo, los aldeanos miran al cielo y rezan para que la sequía no se una a las numerosas plagas que arrasan sus cultivos.

Tomás Pérez, el alcalde, manifiesta que «si no llueve en abundancia este invierno nos veremos obligados a depender de la desaladora, lo cual encarecerá el precio del agua para una agricultura que no hace más que recibir palos por todas partes».

El lamento aldeano encuentra eco en otros muchos lugares de la geografía isleña que pueden también quedarse sin agua, dado que embalses como Cueva de las Niñas almacenan 500.000 metros cúbicos, o sea casi nada.

Agua que se pierde

Candelaria. La presa de Candelaria, en la Vega de Acusa, tiene una capacidad de 396.000 metros cúbicos y se suele llenar cuando llueve. La porosidad de su vaso hace que pierda lo que almacena, por lo que desde hace tiempo la Cooperativa Agrícola de la zona y el Ayuntamiento de Artenara vienen exigiendo al Cabildo que proceda a las obras de impermeabilización del vaso. Las excusas de Demetrio Suárez no convencen a los cumbreños, que aducen que en Acusa se cosechaba con agua medio millón de kilos de papas al año, cosa que seguiría con la presa arreglada.