Proyecto AQUAMAC

Las lluvias han dejado al descubierto las carencias hídricas de la ciudad. La respuesta del Ayuntamiento es un plan, el de infraestructuras hidráulicas, que prevé una inversión de 300 millones de euros en el periodo que va entre 2008 y 2020. El Consistorio pedirá esta semana dinero a Madrid.

El gobierno socialista se ha planteado renovar la red de depuración, saneamiento, abastecimiento e impulsión de la ciudad con el fin de mejorar la calidad de las aguas, garantizar el abastecimiento en todas las zonas y evitar que, tras la caída de lluvias moderadas, las alcantarillas salten a las primeras de cambio.

Todo ello entra dentro de un ambicioso proyecto denominado plan de infraestructuras hidráulicas que prevé una inversión de unos 300 millones de euros para el periodo 2008-2020, según confirmaron fuentes municipales.
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria no tiene capacidad para afrontar esta cuantía de ahí que se haga necesario recurrir a la búsqueda de financiación externa.

Una de las fuentes a las que se quiere acudir es la del Gobierno central. Esta misma semana está previsto que el equipo de la Concejalía de Desarrollo Sostenible, que dirige Néstor Hernández, acuda a una reunión a Madrid en busca de apoyos al proyecto.

Al Consistorio le urge también renovar toda la red de tuberías por las exigencias de calidad del agua de abasto que va a imponer la Unión Europea a partir de ahora. La Comunidad establecerá unos niveles mínimos que son muy difíciles de conseguir en determinadas zonas de la capital grancanaria, como es el caso del istmo de Santa Catalina o de algunas partes de Triana, donde hay tuberías con más de sesenta años de vida.

Una parte importante de la inversión se irá en la construcción de las nuevas depuradoras que necesita la ciudad y que el edil Néstor Hernández quiere llevar a la costa norte de la ciudad. El concejal socialista ha mostrado de modo insistente la necesidad de no concentrar toda la producción de agua de abasto en la zona sur de la ciudad. El último incidente del vertido de fuel desde una tubería de Disa en la playa de Las Gaviotas vino a reforzar esta posición.

Saneamiento

Sin embargo, el esfuerzo del Ayuntamiento no será sólo en depuración. También habrá una especial dedicación a la red de saneamiento (pluviales y residuales), que, en estos días de lluvias moderadas en cuanto a acumulación pero intensas en cuanto al modo, ha mostrado su ineficiencia en lugares ya tradicionales como El Pilar (edificio Reina Mercedes), San Francisco (calle Gobernador Marín Acuña) o los dos pasos subterráneos de Bravo Murillo (el de Mata y el de Muelle Las Palmas), junto a otras zonas de reciente construcción como es el caso de las nuevas plazas de El Polvorín (bajo la iglesia) y del Teatro Pérez Galdós.

El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria quiere evitar que se cronifique esta situación invirtiendo y actuando en las zonas que se suelen inundar con las lluvias.

Un estudio realizado por el geógrafo de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), Pablo Máyer, titulado Lluvias e inundaciones en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, demuestra que las zonas que se suelen ver siempre afectadas por inundaciones son Triana, algunos sectores de Arenales, buena parte del Puerto y de La Isleta, mientras que los desprendimientos son, lógicamente, más propios de los riscos.

De hecho, en el periodo comprendido entre los años 1869 y 1957 murieron en la ciudad 13 personas a causa de las precipitaciones, muchas de ellas debido a los desprendimientos.